jueves, abril 10, 2008

Óleo de una mujer sin sombrero.




Sobrepasando,

el altar de mis ojos

extasiados,

comienzas a desnudarme con tus letras,

que contornean mi figura

una a una.


Trazando líneas,

mis pies dispuestos

en forma distal a mi cuerpo,

soportan la totalidad del peso

de tus dudas

que quiero hacer distantes.

Y condicionan los movimientos de mis piernas

en distintos planos sobre tus caminos.


En blanco y negro,

mis piernas,

van regulando la distancia

entre mi cuerpo y el suelo,

aproximando o alejando,

en mayor o menor medida,

tu silueta jadeante y

esquizofrénica.

Fuertes, se entrelazan con las tuyas,

rotando sobre el eje longitudinal

de tus espasmos.


Como en un croquis,

de manera accesoria,

mis caderas,

(dos imperativos contradictorios),

concilian tus alas

orientándolas

en todas las direcciones

del espacio.

Dando cabida a mi vientre

y a esas contracciones

que provocas.


Añadiendo sombras,

mis manos ansiosas,

traspasan ese océano

para acariciar tus reflejos.

Tiritan sobre tu ritmo,

entre pulso y pulso,

se aferran a tus ojos,

recorren,

arañan,

se aferran a tus ojos.


Difuminando,

mis hombros,

que esperan desnudos,

conteniendo esa espalda

por donde puedes deslizarte,

asfixiarte,

caerte.


Entre aceite de linaza,

mi cuello,

inmóvil,

inconcluso,

expectante de tu lengua y esos dientes

que quiero sentir tan cerca.


Rectificando,

sobrepasando el altar de mis ojos

extasiados,

en dimensiones deshechas

que construiremos juntos,

puedes comenzar

rodeando mi cara,

recorriendo mi frente

durmiendo en mis cejas,

arañando en mis ojos,

pintando mi nariz,

besando mis labios,


Terminando el óleo de una mujer,

sin sombrero.


Agregado: September 21st 2003

Autor: lagrimita

No hay comentarios.: